Por Casandra Ruiz Caro
Estaba la maestra Malva
recitando en secreto un poema,
llegó la flaca y le dijo
te llevo por anatema.
Poco después pasó andando
el maestro Alejandro
y que le dijo: ¿Elizondo,
por las buenas o te jalo?
Andando por los pasillos
la calaca a Ludy vió
y que se entra por las compus
y a todos se los llevó.
Ya vacío el centro de cómputo
sin saber qué más hacer
sentóse junto a la puerta
y ni saben a quién vio volver.
El maestro José Luis
por el pasillo asomaba,
la flaca que lo ve ahí
y lo manda a su morada.
Poco a poco aquella blanca
a todos se los llevó
alumnos, maestros y otros
que por ahí se encontró.
Cuando de plano vacío
quedó aquél pasillito
de a poco, paso a pasito,
se fue yendo luego luego.
Nadie supo qué pasó,
muchos desaparecidos,
pero queda la leyenda
de que cada Todos Santos
se oyen voces de los tantos
que con la güera se fueron,
y quien pasa por los f
puede que de pronto encuentre
a algún raro mequetrefe
con un libro bajo el brazo
en aquél gran edificio
con el tiempo abandonado.
¡Pobres de aquellos letrados!
=)
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